En Italia se ha puesto de moda un nuevo formato de gasolinera para intentar frenar las 'low cost'. Los precios de la gasolina que publicitan en la carretera son más bajos de lo que uno esperaría de un país como Italia, uno de los que tienen el carburante más caro de Europa. Pero tiene truco.
La clave son dos palabras: 'self service'. Sí, en las gasolineras italianas se paga bastante menos por repostar si se opta por coger uno mismo la manguera del surtidor en unos postes determinados. En el resto de surtidores, el precio de la gasolina es unos 20 céntimos más caro a cambio de que un empleado atienda al cliente.Aunque yo pagué la novatada de entrar en una de estas gasolineras atraído por el precio bajo y tener que abonar la tarifa cara por no haberme percatado de que era solo para los postes de autoservicio, se trata de una alternativa interesante entre las estaciones de servicio chapadas a la antigua y las 'low cost' sin trabajadores. Los empresarios italianos han buscado una escapatoria para evitar ser borrados del mapa, al menos de momento.
Una opción quemada en España
En España, las grandes cadenas de gasolineras ya han quemado sus opciones alternativas para luchar contra las estaciones de servicio 'low cost' que ven como una amenaza. La opción italiana de un formato mixto con postes de autoservicio más baratos ya no es posible porque las grandes petroleras fueron las primeras en dejar sus postes sin empleados y obligar a los clientes al 'self service'. Los trabajadores quedaban relegados a meros cobradores anclados a la caja registradora. Por eso presionan con todas sus armas para intentar frenar la expansión de las gasolineras 'low cost' automatizadas.
Hay alguna excepción como gasolineras de Carrefour con surtidores con pago con tarjeta pero sin un descuento adicional en relación con el resto de postes de abono en caja. Mientras dura la guerra, los consumidores tenemos algunas vías para buscar gasolineras baratas.
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