Los directivos del sector del automóvil son chapados a la antigua en muchos aspectos como la vestimenta. El traje y la corbata o el traje chaqueta para las pocas mujeres en puestos altos se han impuesto durante años. Pero eso también está cambiando. El cambio de 'look' más osado hasta el momento ha sido el de Dieter Zetsche, el presidente de Daimler, que dejó en casa el traje clásico y se enfundó los tejanos.
Es una metáfora propia de la reconversión que quieren protagonizar los viejos fabricantes de vehículos como Mercedes. En el Salón del Automóvil de París, Zetsche desafió los códigos de vestimenta establecidos para altos directivos y apareció con la ropa que llevaría un joven el fin de semana. Tejanos, camisa blanca informal, americana 'cassual' y deportivas. Le gustó tanto el nuevo ato que exhibió ante la prensa mundial para presentar la ofensiva eléctrica de Mercedes que, al día siguiente, repitió vestimenta en la rueda de prensa que dio junto a su colega de Renault Nissan, Carlos Ghosn. El contraste de los tejanos con el traje se hizo más evidente todavía.
Clones de Jobs y Musk
Zetsche convirtió su ropa en una prolongación del posicionamiento de marketing de Mercedes de los últimos años: una marca 'premium' con coches al alcance de los jóvenes. Es muy probable que en los próximos meses veamos cómo surgen nuevos clones de Steve Jobs y de Elon Musk.
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